Julian Laham vive en Avellaneda Centro, de 31 años. Es licenciado en Ciencia Política y estudiante de Abogacía.
MULTIMEDIO EN LA MIRA- POR JULIAN LAHAM
Esta vez Laham aborda un tema no menor, ya que La Ciudad de Avellaneda como una de las puertas de acceso principales a la Provincia de Buenos Aires, localidad que fuere históricamente eje principal del la industria y el comercio, se encuentra HOY sumamente afectada por la enorme proliferación de las grandes cadenas comerciales. Ponemos como ejemplo principales Alto Avellaneda Shopping, Hipermercados Carrefour, Wall-Mart, Coto, Falabella y otros “grupos económicos concentrados” que acaparan el mercado y lo monopolizan.
Los vecinos claro, consideramos importante que estas empresas tengan un lugar en nuestra ciudad. Y esto lo decimos porque la cantidad y masividad de productos y la diversidad de precios, hacen que haya más posibilidades de elegir a la hora de comprar.
Sin embargo, como lo afirma el gobierno nacional, en muchos casos estas grandes corporaciones son las encargadas de ser formadoras de precios. (Sin querer entrar y ahondar en la “guerra de cifras” y la batalla del INDEC y las organizaciones de consumidores), todas las estadísticas oficiales y privadas demuestran y no pueden negar que la misma es alta y que los grandes culpables de ello son quienes acaparan el mercado y ponen precios irrisorios con lo cual, el pequeño y mediano comerciante jamás puede competir.
En Avellaneda, algunos hombres tenemos alma de viajeros, y nos gusta recorrer otras localidades del cono urbano, y ver otras realidades.
Y cuando miramos, nos sorprende como en otros municipios se promueve mas la aparición de nuevos centros comerciales grandes en extensión y con más cantidad de pequeños comerciantes, quienes apoyados por verdaderos gobiernos populares, puedan llevar a invertir en nuestra ciudad y dar fuentes de trabajo genuinas a largo plazo. Esta significativa diferencia está a simple vista, y cualquiera que guste recorrer otros municipios, puede notarlo. Entonces, pensamos que algo raro pasa con Avellaneda en particular. En el discurso se dice algo, y después la realidad es otra.
Es necesario que quienes conducen, den una mirada más amplia a los centros comerciales barriales o zonales, impulsar el apoyo a los mercados de barrio, aquellos que nos brindaban los beneficios de tener todo en un mismo lugar, y con precios amigables.
Queremos que sepan que tienen una deuda grande con los comerciantes de Avellaneda. Nosotros nos manifestamos, alguna muy rara vez cuando nos matan los delincuentes a sangre fría y siguen impunes de la justicia. Queremos que aparte de los pocos candidatos que vienen a presentarse, saludar y escucharnos, lo cual valoramos como un noble gesto de cortesía, realicen propuestas para revitalizar algo de lo que no tuvieron tiempo o ganas de ocuparse, el comercio minorista. Lo decimos con el respeto y afecto del trabajador, vecino y amigo. Mantenemos la esperanza que en algún momento van a reflexionar sobre este tema.
Aquí, creo que es necesario hacer un punto y aparte, y resaltar que no todo lo que hizo en este gobierno municipal es malo, a nosotros nos engrandece como como vecinos el saber que se ocupan de los más necesitados, que tenemos una nueva Universidad en Avellaneda. Eso hay que seguir profundizándolo, sea el gobierno que sea. Incluyamos, formémonos como buenos argentinos, buenos ciudadanos, padres, hijos y hermanos.
Pero les queremos sugerir algo señores dirigentes y políticos, o bien algunos pueden retocar el discurso, u otros podrían hacer algo por las personas que apuestan todo su patrimonio en una ciudad, dan trabajo y trabajan más de 12 horas por día, los pequeños comerciantes y los trabajadores. Posiblemente nunca los votemos a muchos de ustedes, pero a veces hay que empezar a incentivar también al que invierte, para que todos podamos progresar y dar más trabajo.